Rusco de monte (Ruscus aculeatus), en el Arroyo de la Tejera, Santa Eufemia. © E. Laguna, 08.08.2009
Ruscos de patio (Ruscus hypophyllum, a la izquierda) y de monte (R. aculeatus, a la derecha), en la rocalla del Centro de Interpretación del Parque Natural del Montgó, Jávea (Alicante). © E. Laguna, 03.09.2009
Los ruscos (género Ruscus) son plantas de la familia de las Ruscáceas, que muchos botánicos prefieren considerar como una subfamilia de las Liliáceas. Aunque la especie más familiar para muchos habitantes de Belalcázar será el 'rusco de patio' (Ruscus hypophyllum), al tratarse de una planta cultivada en casas y jardines, la planta nativa más habitual es el rusco de monte o de hoja dura, Ruscus aculeatus, que en Los Pedroches y comarcas colindantes habita en sotobosques de umbría y barrancos frescos.
Turión o falso espárrago de Ruscus aculeatus. © E. Laguna, Belalcázar, 16.04.2006.
Los ruscos mediterráneos son plantas turionales, lo que significa que emiten tallos de crecimiento limitado a una sola estación, igual que las esparragueras; de hecho, los turiones o 'espárragos' de los ruscos son consumidos como los de las esparragueras en algunas regiones mediterráneas, aunque son mucho más amargos y sólo pueden cocinarse cuando son muy tiernos.
Ruscus aculeatus: filodio con flor (arriba) y planta fructificada (abajo). © E. Laguna, Catarroja (Valencia), 03.02.2008 y 26.11.2007
Una particularidad de los ruscos es que lo que llamamos 'hojas' son realmente un tipo de ramillas transformadas, denominadas 'filodios'; las verdaderas hojas se reducen a hojuelas diminutas en forma de escama. Los filodios se desarrollan íntegramente el primer año, deteniéndose ya el crecimiento del tallo; a partir del 2º o 3r año, cada filodio emite una hojuela, bajo la cual aparecerá una flor, que a su vez puede dar lugar a frutos carnosos con una o más semillas de gran tamaño. En el caso de Ruscus aculeatus, los filodios son muy rígidos y punzantes en el extremo, y suelen tener un color verde claro.
Ruscus hypophyllum en flor (arriba, Valencia, 04.03.2009) y fruto (abajo, Belalcázar, 06.08.2009). © E. Laguna.
En el caso del rusco de patio (R. hypophyllum) los filodios son más alargados, endebles, a menudo algo péndulos; a diferencia de R. aculeatus suelen tener un marcado color verde oscuro. R. hypophyllum es una especie que habita de modo natural en enclaves forestales húmedos de ambiente subtropical de la península Ibérica y el NW de África, siempre cerca del mar; las principales poblaciones españolas se localizan en Cádiz. Una tercera especie que se cultiva más ocasionalmente en España es R. hypoglossum, propia del Mediterráneo Oriental, a la que se atribuyeron en el pasado algunas poblaciones naturales ibéricas, probablemente por confusión con R. hypophyllum, con la que guarda gran parecido.
Parterre de Ruscus hypophyllum. Jardín de Monforte, Valencia capital, 28.10.2006. © E. Laguna
Como plantas ornamentales, se han utilizado desde épocas antiguas en la jardinería mediterránea, aprovechando el contraste de sus partes verdes y los frutos, intensamente rojizos en la madurez -esféricos en R. aculeatus y habitualmente más ovalados en R. hypophyllum. En algunos países, como Italia, los tallos fructificados de los ruscos se venden cada vez más como ornamento navideño. No obstante, el cultivo de estas especies se ha incrementado sustrancialmente en los últimos años por su demanda en fitoterapia y para la obtención de productos farmacéuticos, especialmente para las afecciones del sistema circulatorio.