Capítulo floral de Jasione montana var. gracilis. Belalcázar, 03.08.2013
En el verano los campos pedrocheños lucen predominantemente
el tono gris de las ceras y cubiertas pelosas de la mayoría de plantas que se
atreven a sobrevivir a la dura sequía, como amarantos, cenizos, etc. Pero al
acercarnos a los arroyos es fácil ir descubriendo más colores, dominando sobre
todo los tonos amarillentos y rosados. Son una excepción las plantas de flores
azuladas, entre las que la expresión más humilde es probablemente el ‘botón
azul’ o ‘azulejillo’ (Jasione montana), de la que abunda en primavera una forma
algo más alta (la variedad montana); las formas tardías, más pequeñas (variedad
gracilis) prolongan a menudo su floración en la primera mitad del verano,
aunque siempre en sitios donde se mantienen frescos los suelos. Esta planta pertenece a la familia de las Campanuláceas, pero a diferencia de las verdaderas 'campanillas' (género Campanula) sus flores no suelen aparecer aisladas sino agrupadas en capítulos, formando cabezuelas cubiertas por brácteas u hojuelas basales más anchas.
Planta en floración y detalle de lasa brácteas del capítulo de flores de J. montana var. gracilis, en ejemplares de campos cercanos al Embalse de la Colada. 06.08.2008.