Imagen tomada en la sección de conservas vegetales un hipermercado de Valencia, en agosto de 2015 ©E. Laguna
En los hipermercados empiezan a verse conservas como las que tenéis en la foto. Los botes de la izquierda, en la balda superior, son de criadillas de tierra (Terfezia arenaria); a su derecha, en ambas baldas, ajos porros silvestres (Allium ampeloprassum). Ahora lo importante es que no salgan muchas empresas imitadoras, no sólo para que los emprendedores de esta idea puedan recoger sus beneficios, sino para evitar una recolección creciente en el campo, que pondría en peligro a largo plazo algunos de estos productos -aunque por suerte los dos de la foto sean abundantes y difíciles de extinguir.
Criadilla de tierra recolectada en Belalcázar y humedecida
tras lavarla para desprenderla de la tierra que suelen acumular, y cortada para
ver la gleba o 'carne' comestible.
Inflorescencias del ajo porro silvestre, en el momento del
óptimo de floración y empezxando a formas los frutos. Esta especie produce
además abundantes bulbillos, que se suelen quedar en el suelo al arrancar la
planta, asegurando mejor la pervivencia en el lugar donde vive.